Tonificar sin ganar volumen, ese es el objetivo que se marcan muchas de mis clientas. ¿Qué es para ti tonificar? Normalmente se asocia a reafirmar, endurecer y fortalecer el cuerpo, sin que se aprecie visualmente grasa. Pero como digo, especialmente las mujeres lo acompañan de la coletilla "sin ganar volumen". Tienen miedo a incluir pesas en sus rutinas porque piensan que sus músculos aumentaran rápidamente de tamaño dándoles un aspecto masculino. Por nuestra naturaleza eso es inviable, la ganancia muscular está muy relacionada con la testosterona. Los niveles de esta hormona son muchísimo más bajos en mujeres que en hombres, de manera que es extremadamente complicado que alcancemos grandes volúmenes.
La flacidez no sólo afecta a personas con exceso de peso, también se hace visible en personas delgadas. El peso es un dato relativo, por sí sólo no nos dice el estado de forma de una persona, es importante conocer la composición corporal. La flacidez aparece cuando hay escasa masa muscular y exceso de grasa.
Quemar grasa es el primer paso para actuar contra la flacidez y reducir volumen. La grasa no se tonifica, se elimina para poder apreciar la tonicidad del músculo que se encuentra debajo. Tiene una densidad baja, ocupa cuatro veces más que el músculo, por eso eliminando tejido adiposo también notarás una importante disminución de los contornos.
Con lo que acabo de explicar puedes llegar a pensar que basta con perder grasa para estar tonificado, pero no es así. Las personas delgadas al eliminar la capa de grasa se verán demasiado secas, se apreciará una estructura muscular pobre y sin formas. Aquellas que tienen exceso de peso si sólo reducimos grasa se produce descolgamiento de la piel. Realmente el trabajo muscular es muy importe, no sólo para reafirmar y modelar las formas, también reactiva el metabolismo, mejora la posición corporal, evita lesiones, incluso lo relacionan con un aumento de la actividad cerebral y mayores índices de atención.
Entrenamiento de fuerza, trabajando con cargar aumentamos la tensión de las fibras. Durante la sesión se producirán micro-roturas de fibras que posteriormente darán lugar otras nuevas más fuertes. Y en éste punto me vuelvo a reiterar que puedes estar tranquila, no alcanzarás grandes volúmenes.
Una cosa quiero aclarar, trabajando muscularmente una zona no estarás actuando contra la grasa que se localiza justo ahí. Conseguirás reducir grasa llevando una buena alimentación y potenciando la quema de calorías con actividad. La grasa se pierde proporcionalmente de todo el cuerpo, no de un sitio localizado.
¿Cómo debes entrenar?
Con intensidad!! Cada repetición debe suponer un esfuerzo y debes terminar la serie completamente extenuado. Es decir, la relación carga-repeticiones tiene que ser lo suficientemente intensa como para no poder hacer una repetición más.
Ya sea con pesa libre, máquina asistida, lastres, elásticos o con tu peso corporal, puedes diseñar rutinas que involucren a todo el cuerpo. Para tener unas formas equilibradas distribuye los diferentes grupos musculares a lo largo de la semana (sin olvidar ninguno), puedes hacer más hincapié en aquellas zonas que quieras potenciar especialmente.
El orden de la sesión de entrenamiento también es importante. Al principio contamos con mayor concentración de energía, por este motivo después del calentamiento deberás incluir la rutina de fuerza, seguidamente haríamos el ejercicio de cardio. Durante el ejercicio cardiovascular puedes aumentar tensión muscular, por ejemplo... Si estás haciendo caminata sube la pendiente al máximo, coloca unos lastres en los tobillos o combina con escaleras.
Tonificar es mucho más que adelgazar, es un objetivo muy completo que lleva implícito la pérdida de grasa y la mejora de la estructura muscular, para lograrlo alimentación y entrenamiento van de la mano. Si quieres que valore tu caso y podamos trabajar juntas, aquí puedes solicitar información sobre el servicio de planificación personalizada.