Realmente nada en la vida se consigue sin esfuerzo. Para tener éxito en tus objetivos son necesarios varios ingredientes: voluntad, determinación, acción y constancia. Estas palabras suelen despertar cierta sensación de miedo, quizás sea porque tendemos a relacionar el esfuerzo con sufrimiento en vez de asociarlo a ilusión y disfrute. La mejor manera de aliviar esa sensación de esfuerzo, sufrimiento o desgaste es cambiar el chip y disfrutar de aquello que estés haciendo.
No me quiero desviar del tema, vamos a concentrar nuestros "esfuerzos" en gastar calorías sin que ello suponga un sacrificio extremo.
CAMBIA EL ENFOQUE
Si piensas que algo te va a costar, no te va a gustar o te va a doler, efectivamente te costará, lo odiarás y te dolerá. El poder del pensamiento condiciona nuestras sensaciones.
El ejercicio no puede ser un castigo por esos kilos de más, cambia esa idea porque es una actividad tan enriquecedora que no se merece la etiqueta de castigo. Además de los innumerables beneficios físicos, las endorfinas potencian el bienestar mental generando sensación de relajación, felicidad y alivio del estrés.
ELIGE BIEN
Sabemos que el ejercicio es uno de los pilares para estar en forma, es necesario para mantener el equilibrio calórico del que tanto hemos hablado. Tenemos una variedad de actividades tremenda, así que elige aquella que te motive.
MÚSICA
La música favorece la ejecución de movimientos, la respiración y con ello la oxigenación de todo el cuerpo. No solamente ejerce una efecto placebo sino que físicamente ayuda a que los movimientos sean más armónicos y se mantenga un patrón en la respiración. Además está comprobado que la percepción de esfuerzo se disipa cuando estamos distraídos disfrutando de la música que nos gusta.
CAMBIO PROGRESIVO
El cuerpo requiere de un proceso de adaptación. Empieza con una actividad que se ajuste a tu estado de forma y ve progresando. Si no estás acostumbrado, un ejercicio demasiado intenso puede generar sensaciones negativas que te empujen al abandono.
MASA MUSCULAR
La masa muscular es un excelente quemador de calorías aún estando en reposo. Si estamos buscando quemar calorías con menos esfuerzo vamos a centrarnos en aquellas rutinas que mejoren en tono muscular, como por ejemplo el entrenamiento con cargas.
DESCANSO
Durante las horas de sueño el organismo sigue trabajando, tiene lugar importantes funciones que precisan de energía, así que podríamos decir que dormir quema calorías. Un buen descanso favorece la regulación hormonal potenciando la quema de calorías. Además, cuando nos sentimos descansados tenemos más energía para llevar a cabo nuestra actividad diaria.
ACTIVIDADES COTIDIANAS
El movimiento consume calorías. Incorpora rutinas relacionadas con la actividad que favorezcan el aumento del gasto calórico. Por ejemplo... No evites las escaleras, deja el ascensor y aprovecha la ocasión para moverte. Al trabajo andando!! Un paseo para ir y otro para volver te vendrá fenomenal para despertar antes de comenzar la jornada y para desestresar después. Con pequeñas acciones irás aumentando el gasto calórico total del día sin que ello suponga un gran esfuerzo.
Pequeñas modificaciones en nuestro hábitos transforman lo que somos. No se trata de buscar atajos que supongan un tremendo sacrificio, basta con ir modelando ciertas conductas e incorporar la actividad como algo positivo y necesario en nuestras vidas. Si estás en ese punto y sientes que ha llegado el momento de cambiar, puedes solicitar información sobre las planificaciones personalizadas. > PLAN FOOD / PLAN TRAINING / PACK COMPLETO <